Cercavila de les mulasses

Desde la encantadora Plaça de les Neus, nos lanzamos a un paseo que cualquiera querría repetir. Subimos por la Rambla Principal, esa arteria que late con historias y risas, hasta llegar a la emblemática Plaça de la Vila. Cada paso resuena con la música de la ciudad, entre el bullicio de las terrazas y el murmullo de la gente que, como tú y yo, disfruta de un día especial. Sin prisas, sin planes rígidos, dejándonos llevar por la magia de Vilanova, donde cada esquina parece tener una anécdota que contar. Es un recorrido que alimenta el alma, sin más.